El uso de comida artificial implica cierta experiencia y habilidad. Una vez se superan las primeras pruebas, es un recurso sumamente útil para quienes crían enormes cantidades de gusanos de seda. Entre las medidas a adoptar está: higiene, esterilización adecuada del preparado alimenticio y del instrumental, lavar las manos con desinfectante, preservar de la desecación el preparado con los gusanos y a la vez procurar una correcta ventilación.
El pienso es tolerado por todas las razas de gusanos de seda, si bien algunas tienen algo menos porcentaje de éxito que otras, pero en principio, no existen exclusiones. En mi caso, lo he probado con más de 25 tipos diferentes de Bombyx mori, dando unos excelentes resultados sin diferencias significativas.
Algo muy importante es elegir el tipo de pienso adecuado, ya que no todos tienen buenos resultados.
Dejo algunas imágenes de mi experiencia con la comida artificial para Bombyx mori.
Alimentación artificial con la raza Amarillo Española nº 1
Alimentación artificial con la raza Amarillo Española nº 2 "Sierra morena".
Como se puede apreciar alcanzan tamaños totalmente normales. No hay diferencias significativas en cuanto a la producción de seda ni de éxito de pupación, con respecto a una alimentación natural.
Alimentación artificial con la raza Gran Bagdad
Cebrados (origen desconocido de mercadillo en Valencia)
Raza japonesa A-43 (la diferente coloración de las larvas se debe a que unas larvas están en el estadio 2 y otras en el 3. El color oscuro lo aquieren en el estadio 3).